sábado, 23 de noviembre de 2013

El niño qué de todo creia y de nada ya aceptaría

Estas letras van a ese niño que todos en algún momento mantuvimos fugazmente a lo largo de unos intensos años.

A veces crecemos en un lugar que no queríamos, o que nos sentíamos ajenos a lo que nos rodeaba.
No os ha pasado desde siempre, esa sutil sensación que todo esta como establecido y a la vez nos conformamos y somos llevados de la mano¿? no se muy bien científicamente la descripción que se le podrá dar, me importa poco la verdad.

Para mi, amante de lo desconocido, lector de lo no material en mi años mas añorados, esa sensación de que todo estaba ya descubierto, y  como si un sutil velo, se  me dejara desvelarlo como algo por descubrir..pero sabiendo lo que detrás habría, para mi hombre de lo interior no me cabe duda, que venimos una y otra vez a un plano terrenal y tan conocido de desgracias y de sufrimientos, pero de poco nos vale tal hecho, al contrarió nos sigue admirandolos acontecimientos presentes y venideros, deslumbramos lo que en esa niñez añorábamos posible mente de un lugar mas armonioso y nuestro, en definitiva queramos o no entenderlo ese niño que presto su sabiduría y su ingenuo, aun continuara muy dentro, y los que buscamos aun con esa dificultad volver a encontrar esa sensación de que nada nos importa, seguirá creciendo ese deseó de volver a creer que no existe nada como creernos eternos y muy niños.







No hay comentarios:

Publicar un comentario